30 ago 2011

THE EYES OF BEAUTIFUL LOSERS

La hora del té y de los toros ya ha pasado. Sólo quedan kilómetros y kilómetros de desierto verde y húmedo delante de nosotros. Hoy es el segundo día de mi segunda vida. No soy un gato, pero no quiero conformarme con ser un simple humano. Ya sé que es impúdico contar estas cosas, pero sé también que las lee quién yo quiero que las lea. Exhibicionismo bajo control parental. Hay que creer en la resurrección. Es lo único que me interesa comprar de lo que me pueda intentar vender el Vaticano. Agosto se acaba. Anochece más pronto. El calor ya no te acogota tanto. La gente despierta del letargo canicular. Las calles se llenan de coches de nuevo. Todo vuelve a la asquerosa normalidad. El paréntesis ha durado un suspiro. Cuesta abajo hacia el fin de año. 2011 muere, viva 2012.

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